Puedes otorgarle a cualquier objeto la apariencia de un metal, incluso a cualquier superficie, y aquí contamos también a las paredes. Las pinturas metalizadas en decoración crean un detalle distinto, y en el mercado podemos encontrar de variados tipos:
Pintura efecto metal para muros
Empecemos con una de las más comunes. La pintura metalizada para muros o paredes brinda una apariencia metálica y semibrillante, y se consigue en colores plateados, dorados o cobrizos. Generalmente son pinturas acrílicas al agua, que se aplican con brocha y pincel. Aunque con las herramientas manuales es difícil conseguir un brillo homogéneo, y el resultado es mucho mejor al ser aplicada con pistola o soplete.
También es muy común utilizar técnicas de pintura decorativa como el esponjado o el trapeado, entre otras. A través de éstas técnicas el resultado puede llegar a ser espectacular. La pared luce destellos metálicos pero sin resultar exagerada para el ambiente.
Pintura metalizada para objetos
El efecto es el mismo que la anterior, pero se trata de esmaltes sintéticos o acrílicos, especiales para pintar cualquier tipo de material, incluso madera. De esta manera se puede transformar el aspecto de pequeños objetos y muebles. La mejor opción para este caso son los spray o aerosoles, pero también es posible conseguir la pintura convencional para utilizarla con las herramientas de siempre.
Pintura efecto óxido
Cada fabricante desarrolla su producto de manera diferente, pero todos tienen el objetivo de crear una pintura que simule una superficie «oxidada», es decir con el color característico del óxido de hierro. La pintura efecto óxido puede ser aplicada sobre muros, pero también son muy agradables los resultados en diversos muebles, lámparas, cacharros, y otros tantos objetos decorativos.
Pintura de acabado forja
Esta pintura aparenta lo que comúnmente se conoce como forja o hierro forjado. El resultado es un gris oscuro, de semibrillo y levemente texturado. Se puede encontrar en la forma tradicional para ser aplicado con brocha, rodillo o pistola neumática y también en aerosol, siendo esta última una de las maneras más prácticas de aplicación para objetos pequeños.
Su uso es muy común en objetos metálicos como enrejados, barandas, herrajes rústicos de puertas y ventanas, candelabros y lámparas. Y no es exclusivamente para metales, sino que también para madera y otros materiales.
Pinturas efecto cromo
Este tipo de pintura es muy utilizado en piezas automotrices o motocicletas. El efecto cromo imita la técnica de cromado sobre metales, y el resultado es un brillo lustroso mucho más intenso que el de las pinturas de efecto metálico.
Con respecto a los colores, no solamente se consigue en color cromo, sino que también en dorado u oro, cobre y otros más. Esta pintura debe ser aplicada con pistola, pero también es posible conseguir la versión en aerosol para los que hacemos trabajos pequeños y en casa.
Pintura con glitter
Y por último el conocido glitter, también llamado escarcha, purpurina o brillantina. Está constituido de pequeños granos u hojas de metales, óxidos y otros materiales que le ofrecen un acabado metálico. La pintura con glitter, o efecto escarcha, es usualmente utilizada en artesanías o trabajos de bricolaje, y generalmente es posible encontrarla en aerosol. Hay quienes agregan glitter común en una pintura convencional para pintar objetos de decoración, incluso paredes, y así obtener una superficie con pequeños destellos metálicos.