La pintura es la mejor forma de renovar muebles viejos. No estamos hablando de muebles de estilo o muebles antiguos que necesiten ser restaurados a su estado original, sino la aplicación de diversos colores, texturas y diseños para darle un nuevo aire y adaptarlo a la nueva decoración de cualquier habitación de casa.
La técnica del estarcido o stencil que habíamos visto anteriormente, es ideal para tal objetivo, dándole nuevos colores y dibujos a la superficie del mueble, para que cree armonía y se complemente con el ambiente.
Imagen de potterybarn.com
La pintura de fondo
Como primera medida se debe pintar el mueble de un color uniforme con esmalte sintético o esmalte al agua. Es aconsejable que si la pintura anterior es al aceite, barniz o esmalte sintético, el nuevo material aplicado debe ser de las mismas características.
En caso de muebles de maderas vírgenes o si se han quitado completamente las capas de pinturas anteriores puede, sin ningún problema, utilizarse un esmalte al agua el cual no posee fuertes olores, además de su secado rápido.
Los motivos de las plantillas
Los motivos de los dibujos que posteriormente se apliquen pueden ser diversos, solo basta encontrar la plantilla indicada, o fabricarla en casa, y comenzar aplicarlo con esponja, pincel o pintura aerosol. De mas está decir que la pintura es la misma que la mano anterior.
Imagen de home.howstuffworks.com
Los resultados pueden ser sorprendentes. Los colores vivos son los mas usados en muebles infantiles, tanto como base o como el color del dibujo. Combinado con tonos neutros y blanco se logran resultado muy divertidos.
Existen distintas alternativas, aplicar un diseño con una distribución determinada en la superficie superior o frontal de la cajonera, mesa o cualquier objeto tratado. O también en forma aleatoria como en la primera imagen. No queda mucho por decir, solo basta imaginación y manos a la obra…
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